Hace algunos días Iquique recibió un premio por su potencial de convertirse en una Smart City. Naturalmente, las redes sociales explotaron con críticas y memes con los que uno no puede más que estar de acuerdo.
Sin embargo, no podemos negar que Iquique efectivamente tiene un gran potencial para convertirse en una Smart City y eso es lo que finalmente nos tiene que importar y motivar.
Creo que este es un buen ejemplo para dejar claro qué es lo que diferencia a un verdadero emprendedor/innovador del resto de las personas: su capacidad de transformar problemas en oportunidades.
En síntesis: hechos, no palabras; acción, no ideas.
Desde hace algún tiempo, en nuestro Centro de Innovación y Economía Circular – CIEC, estamos desarrollando tecnologías y proyectos en esta línea, por lo que esta situación nos dio un nuevo impulso para seguir avanzando en nuestro trabajo con más urgencia y pasión que nunca.
Contamos con tecnología de fuentes de agua modulares e inteligentes Neptuno Watergush que, a través del internet de las cosas (IoT), transforman esta infraestructura no solo en un centro de recreación y atracción para la ciudad, sino que en un modelo de negocios que genera data e ingresos al municipio, incluso transformándose en un medio de comunicación para la comunidad.
Este mes estaremos participando en la Smart City Expo Latam Congress en Puebla, México, donde tenemos la certeza de que un mundo de posibilidades se abrirán ante nuestros ojos con el fin de seguir desarrollando e incorporando tecnologías que permitan mejorar la calidad de vida de nuestras ciudades en Tarapacá, Chile y América Latina.